
Lunes 3 de
Julio a las 6 y media de la tarde
LA GRATA SORPRESA
DE SAKA

En la localidad guipuzcoana de
Zumárraga se programó, con motivo de sus fiestas
patronales un festejo pionero en tierras vascas. Un desafío
ganadero entre dos hierros que, según lo programado
soltarían tres vacas y un toro cada uno.
No pasan los festejos taurinos populares
en el País Vasco por sus mejores momentos. Lástima
que una comunidad con tan rica cultura taurina no goce de
buena salud en sus festejos taurinos. Mucha historia tienen
los festejos taurinos en el País Vasco y parece que
ahora su momento no es boyante. No parece que haya mucha
afición, y lo que es peor, las autoridades parece que no
quieren apoyar algo que pertenece a la cultura vasca desde
hace bastantes siglos. Habrá pues que hacer trabajo de base
y fomentar la afición entre los más jóvenes para que vaya
cuajando y se levanten los festejos vascos.
Para el festejo se contó con una
ganadería vasca, la de Marqués de Saka Toros de Lastur,
de Deba (Guipúzcoa), propiedad de Asier Arrizabalaga,
y la de Ripamilán de Ejea de los Caballeros
(Zaragoza), vacada de reciente creación, que busca recuperar
el hierro antiguo de la ganadería cincovillesa de
Ripamilán, al frente de la cual están Armando Sancho
y la Sociedad Ganadería Chicarro.

Hierros y divisas de
Marqués de Saka Toros de Lastur y Ripamilán
Hay que decir que todas las reses que
saltaron al festejo estuvieron emboladas, algo que marca el
reglamento vasco. Al no venir emboladas las reses
aragonesas, tuvieron que ser emboladas en el propio camión
por el ganadero Asier Arrizabalaga, que dio una
lección de manejo del ganado.

Asier Arrizabalaga
embolando a una vaca de Ripamilán en el camión

Vaca embolada con la mansa de Marqués de Saka y Toros de
Lastur
En la plaza se dispusieron dos aparatos,
una pirámide y un banco. Ambos de la Asociación Taurina
“Toro con Soga” de Lodosa (Navarra). Ambos aptos para el
lucimiento de los animales, aunque el banco quizá resultó
demasiado grande. Hay que añadir que la escasa altura de las
tablas del callejón también se prestó al lucimiento de las
reses.
Los recortadores contratados encargados
de mover el ganado fueron: Ricardo Aráiz de Estella
(Navarra), Óscar de Luis de Estella (Navarra),
Egoitz Garcíaetxabe de Aretxabaleta (Guipúzcoa),
Asier Estarriaga de Pamplona (Navarra), Ander
Rodríguez de Zumárraga (Guipúzcoa), Jokín Rodríguez
de Zumárraga (Guipúzcoa) y Aitor Jaso de Bergara
(Guipúzcoa).

Presentación de los
recortadores

De izquierda a derecha y de
arriba a abajo: Jokín Rodríguez, Ander Rodríguez, Aitor
Jaso, Asier Estarriaga, Egoitz Garcíaetxabe, Ricardo Aráiz y
Óscar de Luis
Con una media entrada en la plaza
portátil de Zumárraga dio comienzo el festejo en una
tarde con una temperatura muy agradable aunque nublada por
momentos.

La parte más poblada de los
tendidos

Otras no tanto
1ª vaca: Nº 75,
castaña de Marqués de Saka Toros de Lastur
La vaca que abrió plaza cumplió en su
actuación. Estuvo con movilidad en el ruedo y atendió a los
cites con prontitud. Se enceló brava en el banco en varias
buenas tras Asier, mostró codicia al perseguir al
navarro con chispa. También remató echando la cara dentro
del banco tras un cite de Ander. Tuvo corazón en la
pirámide, porque aunque se mostró torpe para subir los
escalones, quiso subir con los cites que le llegaron. En los
recortes quiso hacer hilo hasta las tablas estando brava de
nuevo. Se entregó la de Saka y cumplió.

Remate en el banco con
Ander

Intentó subir a la pirámide
2ª vaca: Nº 289,
colorada de Ripamilán con el hierro de Jesús
Guembe
La primera de Ripamilán tuvo la
característica que tuvieron todas sus hermanas a lo largo de
la tarde, fue lista. Y al tener esa característica tuvo
tendencia a salir suelta. Quizá en exceso por momentos, ya
que se desentendió demasiado de la pelea. Su inteligencia la
mostró en que cuando acudió a los cites lo hizo amagando
intentando pillar desprevenidos a los recortadores. Se
enceló en varias vueltas con chispa en el banco tras
Ricardo. El mejor detalle lo tuvo cuando subió a la
pirámide con fuerza cuando vio que tenía la presa “a tiro”.
Cumplió en su actuación teniendo movilidad.

Encelada en el banco tras
Ricardo

Bajada de la pirámide con Egoitz y Ricardo
3ª vaca: Sin número,
colorada de Marqués de Saka Toros de Lastur
La mejor res de la tarde fue la soltada
en tercer lugar. Un soplo de aire fresco ver trabajar a una
vaca con tanta entrega y tanto corazón. Sus reacciones
fueron muy impetuosas, mostrando ser un animal poco corrido.
Pero ahí radicó gran parte de su mérito. Sin pensárselo dos
veces subió a la pirámide al primer cite que le llegó, con
prontitud y alegría subió y bajó de la misma. Así fue toda
su actuación, acudiendo a todo lo que se movía. Además tuvo
una gran movilidad para no parar quieta en ningún momento.
Hay que decir que fue una vaca ágil, con una facilidad
pasmosa para subir a la pirámide y trabajar los aparatos.
Tuvo un “lapsus” al querer saltar al callejón en una ocasión
sin ir detrás de nadie. En el banco quiso saltar tras el
cite en un par de ocasiones. Siguió subiendo incansable a la
pirámide, haciendo hilo a la bajada. Y para el final dejó
los mejores detalles. En un par de recortes hizo hilo una
vez que le pasaron por la cara y acabó saltando las tablas
tras el recortador las dos veces. Grandes detalles al saltar
estampándose contra las sirgas en las dos ocasiones, después
de estar agotada por todo lo que se había entregado. Una
gran actuación de la vaca de Saka. Derrochó corazón
trabajando en la plaza, fue despedida con una fortísima
ovación y el público en pie.


Trabajó incansable en la
pirámide

Óscar de Luis citándola para que bajara

Salto al callejón tras Ander
4ª vaca: Nº 280,
colorada chorreada de Ripamilán con el hierro de
Jesús Guembe
La segunda de Ripamilán acusó
demasiado su tendencia a salir suelta. Y es que en ocasiones
se desentendió de la pelea y barbeó tablas. En la pirámide
trabajó tímidamente. Subió una vez hasta arriba, pero sin
entregarse mucho, subiendo los escalones al paso. Después
intentó otra vez subir quedándose a mitad. Lo más destacable
fue que al final de la actuación se enceló en el banco dando
varias vueltas al mismo. No terminó de estar al nivel
deseado la vaca, faltándole celo.


Dos tomas de la subida a la
pirámide. Foto: Julián

Remate en el banco con Egoitz. Foto: Julián
5ª vaca: Nº 17,
castaña de Marqués de Saka Toros de Lastur
Su fría salida estando distraída y
resultando sosa la fue enmendando conforme avanzó la
actuación. Se enceló primero en el banco tras Jokín.
Trabajó en la pirámide primero intentando subir sin éxito,
para después acabar consiguiéndolo. Poco a poco se fue
calentando y empezó a entregarse en la plaza. Echó la cara
dentro del banco y después quiso saltar tras un cite. Acabó
subiendo a la pirámide con raza queriendo coger a la presa
aún sin ser hábil para subir. Al final dejó dos muy buenos
detalles al hacer hilo a Aitor de lado a lado de la
plaza y posteriormente en un recorte de Óscar, saltar
al callejón tras él, aunque fuera un salto descompuesto por
estar agotada ya. Actuación de menos a más de la vaca que
terminó entregándose y mostrando un muy buen fondo de raza.

Intentando saltar el banco

Haciendo hilo en la pirámide a los gemelos

Aitor en apuros con la subida de la vaca.
Foto: Julián
6ª vaca: Nº 12,
colorada de Ripamilán con el hierro de Jesús
Guembe
También fue una vaca muy enterada la
última de Ripamilán. Midió mucho todas sus acciones.
Amagó con inteligencia en los cites buscando un paso en
falso de los recortadores. En el banco buscó las “vueltas” a
los recortadores intentando adivinar sus intenciones. Dejó
un buen remate echando la cara dentro del banco. En la
pirámide nuevamente amagó con subir, quedando todo en el
amago. Resultó demasiado reservona y fría. No terminó de
trabajar como hubiera sido deseable. Le pesó demasiado su
inteligencia, que le hizo reservarse demasiado en busca de
una presa segura que no tuvo.

La vaca buscando el "punto
débil"

Amagando en la pirámide.
Foto: Julián
1º toro: Nº 33,
castaño de Marqués de Saka Toros de Lastur con el
hierro de Juan José Laparte
Toro enrazado el que iba a ser primero de
la tarde y se quedó en único del festejo. Desarrolló
bastante sentido, pero además tuvo chispa y raza para no
mostrarse reservón y reticente a trabajar. Remató en el
banco con raza por arriba. En el callejón echó la cara
también arriba. A los cites arrancó con fuerza e hizo hilo
hasta las tablas. Cortó el viaje en los recortes llegando a
trastabillar a Ander en el embroque. Ha que destacar
un muy buen recorte de Óscar en el que le apuró.
Finalmente trabajó la pirámide subiendo con codicia a por la
presa. En especial en una subida que hizo llegando casi
arriba de un salto y haciendo hilo a la bajada. Una
actuación destacable la del toro de Saka.

Buena subida a la pirámide.
Foto: Julián

Remate en el banco con Egoitz. Foto: Julián

Pasando a los corrales con
la mansa
Estaba previsto que la ganadería de
Ripamilán soltara su toro para terminar la tarde. Pero
el veterinario no autorizó su salida al no estar embolado.
Se intentó que comprendiera que al tener las puntas romas no
se podía embolar y tampoco era necesario, pero no cambió su
decisión. Hubo en la plaza una gran protesta pidiendo que
saltara el toro al ruedo, cosa que no hizo cambiar su
decisión al veterinario. Se ajustó al reglamento vasco, pero
fue muy poco flexible, máxime cuando el toro iba a ser
trabajado sólo por los recortadores contratados, una lástima
que se privara al público del último animal del concurso.

Protestas en el público al no salir el toro de Ripamilán
Para terminar la tarde se soltó una vaca
de Saka para pudiendo participar todo aquel que lo
deseara.
Vaca para el público: Nº 10,
negra de Marqués de Saka Toros de Lastur
Realizó una muy buena salida de toriles.
Su comportamiento fue bravo y enrazado. Acudió pronta a los
cites y con fuerza, empleándose. Fue una vaca seria ya que
cuando se la recortó hizo hilo hasta las tablas echando la
cara al callejón tras la presa con violencia. Buena
actuación de la que evidenció ser una buena vaca, brava y
con raza.

Ricardo intentó subir a la vaca la pirámide.
Foto: Julián

Gran remate echando la cara al callejón.
Foto: Julián
Resultado del
concurso
Mejor vaca: Sin número,
colorada de Marqués de Saka Toros de
Lastur de
Deba (Guipúzcoa)

Asier
Arrizabalaga con el trofeo
Mejor lote:
Marqués de Saka Toros de Lastur de
Deba (Guipúzcoa)

Posando con ambos premios

Abrazo de Armando Sancho y Jokín y diálogo con
Asier
|
Un festejo muy interesante el de
Zumárraga. El público, neófito en este tipo de festejo,
disfrutó mucho gracias al juego de las reses lidiadas
durante el desafío. Un festejo que hará afición, ya que la
sensación fue que el divertimento fue grande.
Balance de las ganaderías
Marqués de Saka Toros de Lastur:
como reza el titular de la crónica fue una grata
sorpresa el juego de las reses de Saka. Al ser
animales que nunca han visto los obstáculos, lo normal
hubiera sido que no hubieran sabido trabajarlos. Pero no fue
así. Y es que cuando dentro de los animales hay buen fondo,
no importa la inexperiencia en este tipo de festejos.
Destacó el corazón de los animales, que les valió para
emplearse en la plaza y entregarse en sus actuaciones. Una
ganadería desconocida lejos de su comunidad, pero que en
Zumárraga tuvo una actuación notable. Cuatro animales
que no desentonarían en un festejo con ganaderías punteras,
lo que habla mucho a su favor, estando, por lo visto en el
ruedo, por encima del juego de ganaderías de mucho más
nombre. El conjunto tuvo bastantes virtudes, pero con el
denominador común del fondo de casta. Despuntó la vaca
jugada en tercer lugar que tuvo una gran actuación. Una vaca
que de estar en otra comunidad autónoma daría mucho que
hablar. Fue el hierro triunfador de la tarde y dio un toque
de atención, que aunque sea un toque sin mucha repercusión,
tiene poderosos argumentos a su favor.
Ripamilán:
llevó a Zumárraga tres vacas con el hierro de
Jesús Guembe, animales que ha adquirido reciente mente
el novel hierro. Se puede decir que cumplió. Sus tres vacas
presentaron también un denominador común, la inteligencia.
Fueron vacas listas que probaron a los recortadores. Quizá
les lastró por momentos al mostrarse algo reservonas y
desentenderse de la pelea. Pero cumplieron las de
Ripamilán al trabajar los aparatos y tener actuaciones
dignas, empezando por una buena presentación de las reses.
Por lo ya comentado de la negativa del veterinario, no pudo
soltar su toro. Una comparecencia en la que cumplió y tuvo
una digna actuación.
Balance de los recortadores
Pese a que ninguno de los actuantes es
especialista en obstáculos se puede decir que en conjunto
estuvieron a gran altura. Y es que si se mira que todos los
animales lucieron y trabajaron los aparatos, se puede
deducir que hicieron correctamente su labor. Optaron por
salir de cuatro en cuatro a cada animal, alternándose. Algo
que fue positivo para así no tener muchas distracciones los
animales. Además se compenetraron bien, sabiendo en qué
momento llamar cada uno a los animales. Y así que no
recibieran cites de varios sitios a la vez. Estuvieron
voluntariosos y aunque para casi todos ellos era su debut en
este tipo de festejo, supieron lucir a los animales. Con
mucho menos nombre cumplieron con lo que hay que hacer en un
concurso de ganaderías. Felicitación pues para Ricardo,
Óscar, Egoitz, Asier, Ander,
Jokín y Aitor.
Un desafío que tuvo personalidad propia.
Una personalidad acorde con la cultura vasca. Y es que un
buen detalle fue que la actuación de las reses estuvo
acompañada con el toque de las dulzainas y el tamboril. Así
como por megafonía se comentando el festejo con acierto,
tanto en Euskera como en Castellano.

La megafonía y los
dulzaineros en un balcón
Hay que esperar que este desafío sea una
primera piedra para edificar en un futuro una base sólida
para los festejos populares en el País Vasco. Quizá
en una comunidad que apoya tanto las tradiciones y lo que
pertenece a su cultura, sería importante que su gobierno
promocionara algo que también pertenece a su cultura.
Y ya para finalizar la crónica, no se
puede pasar por alto el gran esfuerzo de los recortadores
locales Ander y Jokín Rodríguez. Los
gemelos de Zumárraga han puesto mucho empeño en que
los dos festejos que se programaron en su pueblo salieran
bien. Gracias a ellos tanto la Exhibición de recortadores
como el Desafío entre ganaderías tuvieron una buena
organización. Ojalá en futuros años cuajen los festejos y
cada año pueda ir dando un paso más la localidad vasca. Si
en un futuro se consolidaran sería gracias a primeros pasos
como los que están dando, organizando con mucho esfuerzo y
sorteando numerosas trabas, Ander y Jokín.
Víctor Manuel Giménez
Remón
PINCHA PARA VER UNA GALERÍA FOTOGRÁFICA DEL CONCURSO