
Domingo 16 de
Marzo a las 5 menos cuarto de la tarde
EMPEZAMOS BIEN...
Pistoletazo de salida para las anillas en la zona
navarro-aragonesa en la temporada 2008. Nuevamente la
localidad Navarra de Fitero, como ya ocurriera en
2007, celebró el primer Concurso de Recortadores en esta
zona, de la temporada. Segundo del año en esta ocasión, al
ser muy tempranero el concurso de Castellón.
Además del Concurso de Recortadores a
diez parejas, se completó el festejo con una exhibición de
recorte artístico a cargo de tres actuantes. Tanto las diez
vacas como el toro que se empleó para el recorte artístico,
pertenecieron a la divisa de Herederos de Ángel Macua
de Larraga (Navarra).

Hierro y divisa de Herederos de Ángel Macua
La climatología respetó e invitó a ir a
la plaza, por lo menos hasta las taquillas. Si bien al sol
la tarde fue muy agradable, a la sombra refrescó, algo
natural en estas fechas. Eso hizo que la plaza diera
sensación de lleno, coso que cuenta con un aforo de 1.200
localidades.

Prácticamente llenos los
tendidos. Fotos: Pili
La dirección de lidia estuvo a cargo de
Felipe Sota, organizador también del concurso con la
empresa Taurovisión. Estuvo atento a los quites en
todo momento cumpliendo bien su labor. En el capítulo del
debe hay que apuntar que los capotes en varias ocasiones
quedaron fuera de los burladeros en las troneras, lo que
podría haber costado el desgraciarse algún animal.
Con media hora de retraso sobre lo que
anunciaban los carteles, comenzó la presentación de las diez
parejas actuantes, así como de los artistas que luego
realizarían la exhibición de recorte artístico ante el toro.

Rompiéndose la presentación
de las parejas. Foto: Pili
Tras la presentación de los actuantes,
dio comienzo el concurso.
Segundo concurso para el joven Imanol,
que además formaba pareja por primera vez con Alberto.
Esto, aún con una vaca muy sencilla, les pesó. El peso de la
actuación para el de Villava, no tan confiado el de Peralta.
Muy sencilla la de Macua, porque no tuvo picardía
alguna, ni siquiera mucho aguante para acudir los tres
minutos a los cites. Querer, quiso, poder, ya fue otro
cantar. Más lo hubiera cantado, valga la redundancia, si la
hubieran atacado como permitía. Vaca a los medios y a por
ella. Pero como no hubo continuidad, pues se fue sin
desgastar una vaca que ya salió desgastada por su escasa
experiencia. Lo positivo es que quiso hacer hilo, aunque muy
tímidamente, por la ya mencionada falta de poder.
Por delante Imanol muy fácil, con desparpajo y clase
para quedarse en la cara, pero sin acierto. Tiró con mucha
ventaja a la vaca hasta que, para defenderse la res, se
metió en tablas, y ahí aún tiró más de cara con toda la
ventaja para el animal. Alberto al segundo no estuvo
muy confiado. Se limitó a hacer el quite, más que a intentar
anillar.
Al final de la actuación a la de Macua le costó salir
cada vez más y en algún embroque protestó. Una de las de más
posibilidades de la tarde. Visto el transcurso del festejo,
a nada que hubiera acertado un poco con la mano Imanol,
se hubiera llevado el gato al agua. Segundo concurso y abría
plaza, es normal.
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La Nº 21 de Herederos de
Ángel Macua. Foto: Pili

Con la mano en la punta del
pitón Imanol. Foto: Pili

Alberto estirándose hacia
la cara. Foto: Pili

Protestó la de Macua.
Foto: Pili

Bien parado en la cara
Imanol. Foto: Pili
Empieza la temporada la pareja estellesa
siendo agraciada por la fortuna. Ya “cataron” a la de
Macua en 2006 en su propio pueblo, y se volvieron a
cruzar sus caminos en Fitero. Un “regalico” la Nº
4.
Complicada como ella sóla, rara, extraña, también. No es
normal la manera en la que se cruza. Corta el viaje en los
recortes de manera descompuesta. Cambia la dirección según
acude al embroque. Que parece que no ve bien ya se ha dicho
muchas veces, pero es lo de menos. Una vaca así, que tampoco
luce para el ganadero, es un auténtico regalo.
Como Ricardo y Óscar lo sabían, y sabían
también los bombones que quedaban por detrás, pues a cumplir
el expediente, que ya era bastante. Por delante Óscar
a padecer, porque la de Macua fue a taparle la salida
siempre, pero cortando sin ir para delante, frenada en
alguna ocasión. Que tenga algún defecto en la vista, podría
ser, pero al final lo que cuenta es que no tiene una
embestida franca. Hay maneras y maneras de cruzarse.
Tuvo que desistir Óscar abriéndose en los primeros,
lo que hizo que Ricardo no pudiera entrar. Hubo una
tímida tentativa de ir por el izquierdo, algo que debían
haber probado. Y al final, de la actuación, lo que quedó,
fue un meritorio recorte de Óscar. La solución pasaba
bien por el pitón izquierdo, bien por cogerla muy en corto y
retorciéndola, porque le cuesta mucho revolverse.
La de Macua, muy complicada, pero sólo eso.
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La Nº 4 de Herederos de
Ángel Macua. Foto: Pili

Muy cruzada la de Macua

Se tuvo que abrir Óscar en
los recortes. Fotos: Pili

Entrando al segundo
Ricardo. Foto: Pili
Buena salida realizó la tercera de la
tarde. Se desplazó con celeridad atendiendo a los primeros
cites de tanteo, de lado a lado de la plaza.
Extraña pareja para anillas la formada por el madrileño y el
castellonés. Formaban pareja por primera vez y si bien el
argandeño tiene una dilatada trayectoria en las anillas, el
de Betxí se ha prodigado poco en esta disciplina.
Pero fue por delante Alberto con decisión, apurado
también, porque en todos los recortes consiguió pasar a la
de Macua con dificultades. No por ello dejó de dar la
cara, algo positivo. “El Peque” se limitó a entrar al
quite, bien para quitarla, pero lejos de cualquier opción de
anillar al no quedarse en la cara y abrirse a favor de la
vaca. Eso llevó a que no pudiera haber terceros. Salvo en
una ocasión que sí que pudo entrar Alberto al
tercero.
Finalmente optaron por ir al izquierdo, pero tampoco hubo
resultado. Anduvieron bastante lejos de tener posibilidades
reales de anillar. A ello colaboró la vaca de Macua
que tuvo chispa y complicó la labor al cortar el vieja y
revolverse pronta al quite. Cumplió la tercera de la tarde.
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La Nº 103 de Herederos de
Ángel Macua. Foto: Pili

Apurado en los recortes
Alberto. Fotos: Pili

"El Peque" por el izquierdo.
Foto: Pili
¿Cómo se les puede ir sin anillar a esta
pareja, una vaca tan simple de recortar? Por dos razones, la
primera que la vaca no es que humillara, es que llevó el
morro por el suelo. Y la segunda es porque la pareja no
acertó en los terrenos.
Vaca con nulo poder. Justo le vino para aguantarse en pie
los tres minutos. Descompuesta y acalambrada estuvo, no tuvo
su condición motora coordinada. Signo inequívoco de estar
muy poco o nada corrida.
Muy cómoda estuvo la pareja para recortar, otra cosa era
anillar. Ventaja, toda la del mundo y más, para la de
Macua. Muy despacio le hicieron las cosas, con Manolo
mimándola y quedándose en la cara, y Mariano entrando
al segundo, dando primeros, porque se paraba por completo a
esperar el giro de la vaca para empezar la carrera.
Con los belfos llenos de arena, quedarse en la cara una
eternidad tampoco fue la solución. No acabó de levantar la
cabeza aún así. ¿Por dónde pasaban las posibles soluciones?
Por llevarla a los medios para que protestara menos. No en
el tercio como lo hicieron, porque además la invitaron a no
hacer caso al quite alguna vez. Si hubiera hecho hilo en los
medios la podrían haber cortado en la carrera, al estar
cerca de tablas no había margen. Lo de hacer hilo hubo que
intuirlo, ya que por su poca fuerza, era un hilo muy tímido.
Aunque recortaron mucho, la pareja que más lo hizo en el
concurso con diferencia, los intentos de anillar fueron
vanos. Pero en el debe hay que decir que tampoco acabaron de
hundir a la vaca, algo que no era muy complicado. Quisieron
mimarla los tres minutos en vez de no tener piedad y aunque
la vaca hubiera caído, seguramente no le hubieran quedado
fuerzas para humillar y hubiera llevado la cabeza más alta.
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La Nº 53 de Herederos de
Ángel Macua. Foto: Pili

Mariano saliendo de la cara
con Manolo al quite. Foto: Pili

Manolo descarado ante la
embestida humillada.
Fotos: Pili

También se
quedó mucho Mariano en la cara. Fotos:
Pili
Otra conocida que no faltó a la cita, del
hierro de Larraga. Dilatada trayectoria la de esta res en
los concursos, ya que va a la mayoría de los que hace la
vacada.
Ander
y Jokin lo vieron tarde, muy tarde. Tan tarde como
que estaban en la cuenta atrás cuando hicieron lo que pedía
la vaca. Faltó decisión y el ver lo que requería el animal.
Vaca fuerte, pero que no se come a nadie.
Empezaron dubitativos y hubo un par de
recortes, que no fueron tal, extraños. La vaca no pudo ver
el arranque y se giró al revés permitiéndole la línea recta.
Es decir, acudió por el izquierdo, sin girarse mucho, a un
recorte por el derecho. Por delante, había hecho Jokin
algo de mucho compromiso, como es dar el primer recorte en
la hacia la puerta de toriles. Invitaciones a la vaca a
crecerse.
Llegó la cuenta atrás y en esos cinco últimos segundos es
cuando estuvieron bien. Bien Jokin con exposición
ganando la cara cerca de tablas y bien Ander al quite
parando a la vaca perfectamente. Pero claro, entonces se
acabó el tiempo.
Brava la de Macua ya que aunque faltándole batalla se
arrancó con prontitud a los cites y con alegría.
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La Nº 8 de Herederos de
Ángel Macua. Foto: Pili

Ander apurado por la de
Macua. Foto: Pili

Dos recortes de Jokin, el
primero en la puerta de toriles.
Fotos: Pili
La mansedumbre es una condición dentro
del comportamiento del ganado de lidia. Y se pudo comprobar
en la sexta de la tarde. La de Macua manseó durante
los tres minutos, paliativos pocos.
Quizá lo que más palió ese comportamiento fue la altura de
la barrera, de haber sido más baja, quizá la res hubiera
hecho una visita al callejón buscando salida. Muy pronto se
enteró por dónde había salido, y ahí estaba a gusto. Pero
como además tuvo movilidad, pues al sentirse incomodada por
la pareja en esos terrenos, se dio un garbeo por la arena
barbeando las tablas.
La pareja no lo vio, y como no lo vio, pues es difícil
aplicar el manual. Si no sabes en qué capítulo hay que
buscar la solución, es imposible encontrarla. La vaca estaba
claro que no tenía muchas ganas de salir de tablas,
entonces, lo que pedía era arrastrarla al hilo de las tablas
y estando uno detrás de otro, entrar a recortar. Quizá
hubieran sido de uno en uno de los recortes, o quizá se
podría haber encelado a la vaca en la rueda.
Sólo al final Asier dio un recorte en los terrenos de
toriles al que quiso acudir la vaca y en el que consiguió la
anilla. Después, en los últimos segundos, desconcierto.
“Pericolo” al izquierdo en un recorte atropellado y
Asier intentando ir al derecho.
Muy mal la de Macua, manseando y no teniendo ningún
detalle positivo. Despreció cites, quiso irse suelta y le
gustó muy poco salir de tablas. Suerte que ya las parejas no
salen con la mentalidad de encorrer a las vacas que salen
sueltas.
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anilla |

La Nº 15 de Herederos de
Ángel Macua. Foto: Pili

Barbeó tablas y despreció
cites. Fotos: Pili

Sin acoplarse "Pericolo".
Foto: Pili

El recorte que fue anilla
de Asier. Foto: Pili
De muy similar tipo y de comportamiento
muy parecido a la cuarta de la tarde. Muy poco poder y
humillando mucho. Además esta tuvo una mala lidia que le
hizo acentuar su comportamiento y la llevó a defenderse.
Una vaca que no pedía partirla, porque lo que había que
hacer es cuidarla, se partió dos veces, con dos recortes de
salida. Lo que le faltaba, además de muy poca fuerza y de
renquear de los cuartos traseros, dos riñonazos. Las vacas
que hay que partir son las que llevan mucha gasolina, no las
que salen en la reserva.
Se movió a trompicones, otra vaca nada corrida. Descompuesta
en las embestidas, como si los cuartos traseros y los
delanteros no fueran del mismo dueño. Casi no podía el
animal. Y para colmo, no se le recortó con mucha ventaja y
todo pegada a tablas. Mala lidia. Vaca a los medios y a
recortar con ventaja. Allí hubiera acompañado más.
Lógicamente se desesperó la pareja, porque si se ataca a una
vaca que marca un surco en la arena con el hocico, no se
consigue nada positivo.
Volaron los tres minutos y pese a recortar mucho, las
opciones de anillar fueron muy pequeñas. Desaprovecharon a
una vaca, que igual que la cuarta, llevándola a los medios
hubiera sido otra cosa.
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La Nº 41 de Herederos de
Ángel Macua. Foto: Pili

Lago tampoco acertó a
llegar al pitón. Fotos: Pili
Premio en el sorteo. La vaca de ganar
vista la tarde. Sólo por lo barato que estaba el concurso
con una anilla se consiguió premio. Pero fue una vaca
propicia para que los aros superaran la media docena, en el
peor de los casos.
Vaca atorada de Macua o quizá “acaponada”, hasta
parecía tener morrillo. Sin ubres, la vaca no había criado
este invierno. Fuerte y lustrosa. Todo eso en el aspecto
físico. En el comportamiento, pues noblota, sencilla, sin
mucha gracia y desrazada. Fue a los recortes porque había
que ir, pero eso sí, muy franca y con la cara alta. La más
fácil de anillar de la tarde.
Lógicamente fue “Chipu” por delante, fácil estuvo
porque la dificultad no era mucha, máxime cogiendo a la vaca
a los cuartos traseros. Llegó con solvencia al pitón de la
vaca, pero en el momento clave, inexplicablemente le falló
la mano. Sólo una anilla en los bastantes recortes en los
que llegó bien a la cara. Al segundo fue Alberto,
todavía más a los cuartos traseros. Y al tercero, entre que
no terminaba de cerrarse en el segundo y que la vaca quería
ir a su aire, pues nadie.
Desaprovechada la de Macua, una novilla, grande pero
novilla. Porque tirarle tan a los cuartos traseros a una
vaca tan franca y fácil al recorte, no tiene mucho sentido.
Y no colocarle más que una anilla, pues es desaprovecharla.
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1
anilla |

La Nº 4 de Herederos de
Ángel Macua. Foto: Pili

Agarrando el pitón.
Foto: Pili

Inexplicablemente falló las
anillas. Fotos: Pili

Alberto con dificultades.
Fotos: Pili
La pareja local contó lógicamente, con el
favor del respetable. Y también contó con el favor del
sorteo, con una de las que se podían anillar en la tarde.
Pero al no formar pareja habitualmente, no estuvieron
compenetrados y eso les pesó mucho.
Realizó una buena salida la novena. Galopó con fuerza y
remató en los burladeros al acabar de cruzar la plaza. Los
cites de tanteo dejaron ver a una de las reses destacadas en
la tarde. Tuvo chispa.
Fue Javier por delante. Con precipitación, presionado
y sin entenderse con la pareja. La vaca no pedía cerrarla en
tablas, y se le cerró. Y como vio que ahí tenía que ser, la
quiso atacar demasiado. Tanto que no lo veía al arrancar, y
el pisotón para girarla, llegaba cuando estaba demasiado
encima de la vaca. Así se hacía muy complicado el acople.
Cuando la sacaron al tercio pudo haber más continuidad. Algo
desbarajustada pero hubo continuidad pudiendo sacar más
recortes seguidos. La vaca fue noble al recorte, pero tuvo
fondo de raza para ir con alegría y querer ir a todos.
José Javier estuvo voluntarioso acompañando a Javier.
La actuación tuvo más de ilusión que de resultado patente,
pero es algo normal al tratarse de su primer concurso y
encima actuar con la presión de estar en su pueblo.
Bien la de Macua, pese a evidenciar también tener
pocas tablas en el festejo popular, tuvo un comportamiento
destacado. Brava la del hierro de “La Bomba”.
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anillas

La Nº 9 de Herederos de
Ángel Macua. Foto: Pili

Le falló a Javier el entrar
sin que lo viera la vaca. Fotos: Pili

José Javier lejos del
pitón. Foto: Pili
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10ª
PAREJA |
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Egoitz Garcíaetxabe
de Aretxabaleta (Guipúzcoa) |
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Aitor Jaso de Bergara (Guipúzcoa) |
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Nº 2,
negra |
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Cerró el concurso otra de las de siempre.
Como el concurso estaba con una anilla, pues para la pareja
vasca opciones había. Pareja que arranca la temporada con
intención de continuar juntos. Sin restar un ápice de
méritos a Aitor, es una verdadera pena que Javier
Corres haya decidido no seguir en los concursos.
Al poco de comenzar la actuación Egoitz tuvo un susto
en circunstancias extrañas. Dudó entre entrar al burladero o
saltar y lo alcanzó la de Macua. Lo alcanzó, pero por
fortuna sin que los pitones hicieran nada más que golpearle
las piernas.
Enrazada estuvo y dejó muy buenos detalles la vaca. Ahora
bien, no es una vaca para anillas. No quiso salir de tablas,
incluso marcó la penca del rabo en ellas. Y hasta estaba a
gusto en los montones de tierra de los burladeros,
llegándole la arena hasta las rodillas. Se levantó a
rematar, y la gente disfrutó con los remates, pero luego,
para fuera, no quiso nada. Vaca de capea, no de anillas.
La vaca lo que pedía era recortes arrancando de tablas, pero
eso era harto complicado. Pese a que lo intentaron no le
sacaron partido Egoitz y Aitor. Tan sólo algún
recorte aislado.
Una vaca que se mete en tablas, por enrazada que sea, es que
se ha pasado de vueltas para las anillas y ya no es apta
para los concursos. Eso le pasó a la Nº 2 en Fitero.
Y es algo que ha marcado también en ruedos grandes.
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anillas

La Nº 2 de Herederos de
Ángel Macua. Foto: Pili

Egoitz tuvo un susto
importante. Foto: Pili

No quiso salir de tablas.
Foto: Pili

Remató arriba enrazada.
Foto: Pili

Apurando a Aitor.
Foto: Pili
Exhibición de recorte artístico
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Nº 42,
castaño ojinegro listón |
David Ramírez “El Peque”
de
Arganda del Rey (Madrid)
Alberto Ibáñez de Betxí (Castellón)
Javi López de Puzol (Valencia)
Una vez finalizado el concurso se realizó
una exhibición de recorte artístico, a cargo de tres
artistas, como así se anunció por megafonía. ¿Por qué no
tratar a todos por igual? ¿Por qué hacer ahínco en la
condición de “artistas” de los tres actuantes ante el toro
limpio? ¿Hasta entonces no habían actuado artistas? Mejor
no, el arte a los museos.
Toro cuajado de cuerpo, aunque de pobre cara, mogón del
derecho. Para cinqueño ya. De presentación correcta para
Fitero. Tuvo un comportamiento correcto y apropiado para
lo que se trataba. Algo chochón, pero se arrancó bien a los
cites, fue bravo y cumplió.
Se realizaron diferentes suertes, predominando los quiebros
y saltos, escaseando los recortes. “El Peque” realizó
un par de suertes de esas que encandilan pero que tienen más
de inmolación que de suerte taurina. Con mucho riesgo,
innegable es, pero no es necesario rizar los rizos tanto.
Alberto realizó quiebros con serenidad. Y Javi
saltó, con arrastre la mayoría.
Una vez terminada la actuación, en la que
nadie se montó en el animal, y eso que está de moda, menos
mal, qué alivio, lo que hubo es dos faltas de respeto,
primero a los compañeros y luego al concurso. Francisco
París “Foro”, salió a dar unos pases al toro y cuando ya
la puerta de toriles estaba abierta, David Cortés
pegó un quiebro. Ambos “espontáneos” no tuvieron respeto ni
al público ni a los compañeros.

El toro Nº 42 de Herederos
de Ángel Macua. Foto: Pili

"El Peque" de rodillas. Foto: Pili

Apurado en tablas. Foto: Pili

Quiebro de Alberto Ibáñez y
salto del ángel algo defectuoso de Javi López.
Fotos: Pili
Terminado el concurso, empate por el
primer puesto. La pareja “Chipu” – Alberto, no quiere
desempatar, aduciendo que el primero está lesionado. Si dice
que está lesionado, pues hay que creerle. Ahora bien, lo que
procedía es que Alberto con un auxiliar saliera al
desempate, si “Chipu” no podía.

Discusión sobre el
desempate
Lo cierto es que al final, la pareja
compuesta por “Chipu” – Alberto decidió que el
montante económico del primer premio fuera para
“Pericolo” – Asier, y ellos se quedaban con el segundo.
Hasta ahí todo perfecto. Pero claro, si luego por megafonía
se dice que ambas parejas son ganadoras, pues error. No eran
ganadoras. Una había renunciado al primer premio por lesión
de uno de ellos, por lo tanto no podían ser ganadoras ambas.
Un concurso malo, sin paños calientes.
Mal el ganado y mal las parejas, si fallan los dos, da como
resultado que lo visto en la tarde fue para crear poca
afición.
BALANCE DE LA GANADERÍA
Cinco de la casa y cinco de “La Bomba”
fueron al concurso. Las de la casa, las
de siempre. Macua es lo mismo que
decir 2, 4, 8,
103. De las cuatro, sólo la Nº 8
y la Nº 103, estuvieron bien. De
las de “La Bomba”, pues poco que
decir, desde el punto de vista del
espectador. Vacas limpias y sin poder no
son las apropiadas para un concurso. Con
varias salidas a puerta cerrada se les
hace coger fondo y se descartan las que
humillan, o bien se hace que no humillen
tanto, según tienen más salidas. Se
intuyó algo, pero la poca fuerza y el
escaso poder emborronaron lo que
hubiera. De todas, la mejor la Nº 9.
Ni que decir tiene, que el concurso fue
altamente desigual, desde las vacas
limpias, hasta las que se cruzan y no
dejan que las recorten. No es bueno que
haya tanta diferencia.
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BALANCE DE LOS RECORTADORES
Mal. Si vacas medio limpias o limpias, no
se aprovechan, pues poco hay que añadir.
Toca “espabilar”. Con el nivel que
dieron en Fitero las parejas en
conjunto, se les pueden quitar las ganas
de organizar concursos a muchas
poblaciones. Así que, toque de atención.
A destacar, pues a los nuevos, que por lo
menos tuvieron ganas. Imanol Ugarte
y Javier Domínguez pusieron las
ganas en el concurso. En el que unos se
dejaron vacas “vivas”, otros no
acertaron a saber lidiar y otros
estuvieron desdibujados. Un concurso con
vacas tan fáciles como las que hubo que
se gane con una anilla, es para
hacérselo mirar. Lo pusieron muy barato.
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Taurovisión como organizador del
festejo, en lo que le atañe, correcto, el concurso se
organizó bien en líneas generales, salvando el error de
proclamar vencedoras a las dos parejas. Una vez se abrió la
puerta de toriles, el mal concurso, culpa del ganado y de
las parejas.
Víctor Manuel Giménez
Remón