|
El
balance tiene que ser diferente al de los años anteriores
por fuerza. Cambio de empresa, cambio de organización y
cambio de casi todo, aunque algunas caras fueran las mismas
repetidas. Los que deciden han cambiado. Los que mandan
también, eso sí. Y por tanto ha habido un giro. Giro que
hacía falta.
Como todo en esta vida, lo nuevo siempre parece mejor. A
medida que se convive con ello, va pasando factura el
tiempo. Con esa ventaja partían los nuevos, con ser nuevos y
con que los viejos se quemaron ellos sólos. El amor no dura
eternamente y se desgasta. Contra ese desgaste tendrán que
luchar en años venideros. En función de ello, su ciclo será
más corto o más largo.
También se contó con una remodelación importante de la
feria, y eso apetecía. Por ello lo que se iba a vivir este
año en La Misericordia iba a
parecer mejor. Lo cierto, es que además de parecerlo, lo ha
sido.
SUELTAS DE VAQUILLAS
Por fín, sí, por fin. Nueve
mañanas, con nueve
ganaderías y con un plantel
en el que había ganaderos de
fuera de
Aragón.
Ya era hora. La previsión
era esa, la de una mañana
cada ganadería. Ya nadie
repetía y nadie iba a hacer
medias mañanas. Error. Los
que están por encima del
bien y del mal, hicieron lo
que les dio la gana. Y la
organización tragó. Lo bueno
es que en la plaza se supo
todos y cada uno de los días
las vacas que saltaban a la
arena por megafonía, ¿tanto
costaba hacerlo antes?
Pero bueno, imposiciones y
consentimientos al margen,
el plantel era difícilmente
mejorable. Pocos de los que
se quedaron fuera han hecho
méritos para su inclusión,
por encima de los que
estaban. Se ha dado un paso
al frente y la intención ha
sido la de traer a los
mejores posibles.
Y
claro, se vino a demostrar
dónde está cada uno y para
lo que está cada uno. La
cosa está mal, mal. Porque
el balance de la feria,
yendo los que tenían que ir,
no es para tirar cohetes.
Quién piense que alguno de
los que se quedara fuera
podría haber superado lo
visto, le podrá sonar la
flauta con algún caso
concreto aislado, con la
mayoría no. La realidad es
la que es.
Lo inquietante es que tan
sólo cuatro hierros han
aprobado en
Zaragoza en las
vaquillas.
Cuartero,
Ozcoz,
Zapatería y
Macua,
bien ordenados de esta
manera. Quiere decir que los
otros cinco, no lo hicieron.
Aunque algunos de esos
suspendidos se puedan
repescar para armar el
cartel del año que viene.
Cabe decir que en la feria
se echó mucho de menos a la
ganadería de
"La
Bomba", que será
difícil que la volvamos a
ver. Una gran pena para los
aficionados.
Cada vez está más difícil la
plaza, eso es cierto. Cada
vez las vacas lo tienen más
complicado. Mucho pesado con
ganas de protagonismo. Desde
siempre, los buenos
recortadores han sido los
que han antepuesto el
lucimiento del animal al
propio. Eso ya no se ve. Si
una vaca está luciendo en
tablas, se la coge con la
chaqueta y se la deshace. Si
una vaca se ve con
intenciones de subir al
tablao, se quita de ahí para
dar recortes y más recortes.
El mérito es relativo. Una
vaca pendiente de
tropecientas personas y
embolada. Mejor meter
anillas en los concursos y
no ponerse pesado a base de
recortes y más recortes
intrascendentes.
Y por cierto, con muchísimo
menos tiempo entre vaca y
vaca todas las mañanas.
Hicieron falta muchas más
vacas para hacer las
mañanas, porque había más
tiempo de vaca en la arena.
Es decir, a mayor número de
animales, más complicado
todo. Eso, gracias a la
organización y al torilero,
qué bien.
En fin, que la cosa está muy
mal a nivel estatal en el
ganado corrido. Digan lo que
digan los iluminados que
llaman iluminados, con una
fijación extraña a escribir
prácticamente un párrafo
diario de tirachinas. Cuánto
cuesta dejar de figurar y se
recurre a cargos absurdos
casi de caridad, para
asesorar al primer edil. Si
viniendo ganaderías de todo
el panorama nacional, no
llega, como para recurrir
sólo a
Aragón. Hay que estar
más al tanto del panorama,
para poder dictar.
Un año más en el centro
estuvo el tablao de la
empresa
"Ruedo
Bravo". Es el aparato
ideal por sus dimensiones y
sus materiales. El suelo de
goma hace que las vacas
agarren. Tablao hecho para
Zaragoza. Es el que
tiene que estar y ya se ha
hecho imprescindible.
Mejor que el año pasado, por
cartel y por resultados.
XXVII CAMPEONATO NACIONAL DE
RECORTADORES
Estuvo bien y saltó la
sorpresa. Con ganado
desigual como siempre
mientras no lo haga un sólo
hierro. Hubo unas cuántas
parejas que estuvieron bien,
pero este año las vacas, en
conjunto estuvieron bastante
por debajo de lo que pide el
Campeonato Nacional.
Morella,
Lago,
Diago,
Ander,
Jokin,
"Majín",
Javi,
"Chusky"
y
Sedeño, estuvieron
muy bien. Es un abanico
importante de recortadores.
Y además de ellos, dos
parejas por encima del
resto.
Asier e
Imanol,
que se llevaron el concurso
con cierta ayuda de la vaca,
pero creyendo en sí mismos
mucho. Y sobre todo
Manolo
y
Cuairán que
demostraron por qué son los
mejores.
XI CONCURSO DE CORTES
El mejor concurso de la
feria. Los toros valieron y
el elenco de participantes
estuvo a un nivel alto. Todo
ello sumado a la sugestión
de de la megafonía, hizo que
todo pareciera como lo mejor
vivido nunca. Fue bastante
bueno, esa es la realidad.
La corrida de irreprochable
presentación. Los de
Andoni
Rekagorri y
Cruz
Madruga fueron unos
auténticos pavos, dejando en
evidencia a los que saltaban
por las tardes. El juego
también fue bueno y eso es
lo que hace que un concurso
vaya bien.
Hubo bastantes destacados.
El ganador
David
Cortés por el riesgo
que corrió y la emoción de
sus suertes.
Jesús
Benito "Chispa", que
podría haber ganado el
concurso y nadie se tendría
que haber echado las manos a
la cabeza. Y
Sergio
Delgado, que cerró el
podio, porque hizo lo que
hace habitualmente, ser muy
bueno. Además de ellos,
varios participantes
estuvieron a un nivel alto.
El punto negativo fue la
cornada de
Juan
Manuel Corcovado, que
afortunadamente fue mucho
menos de lo que podría haber
sido.
DESENCAJONAMIENTO Y XXV CONCURSO
DE ROSCADEROS
El desencajonamiento,
aburrido. Un plato de habas.
No así el
Concurso de Roscaderos.
Fue bueno, hubo emoción. Con
un lote muy diferente al del
año pasado
Rafael
Alarcón salió muy
reforzado del
Pilar.
Cambió muchas vacas y
acertó.
El conjunto estuvo muy bien,
vacas que pegaron fuerte,
pero por llegar galopando,
ni por cuernas abiertas, ni
por kilos. Solamente
emborronado porque al final
saltaron las dos más
deslucidas de la noche y la
sensación fue de acabar mal.
Se vio un concurso más que
interesante con las
cuadrillas de siempre más
que las que han entrado las
últimas ediciones a rebufo.
Se notó la diferencia entre
las experimentadas y las
demás.
También hubo nota negativa
en este concurso al sufrir
una cornada el roscaderista
Sergio
Fanlo. Más aparatosa
por la sangre que otra cosa,
por fortuna.
CONCURSO DE RECORTADORES CON
TOROS
Festejo nuevo en
La
Misericordia y no
tiene pintas de irse a
repetir. Resultó muy
aburrido y no llegó a tener
gracia en ningún momento.
Los toros, para las vacas.
Pese a que se trajeron toros
con las condiciones ideales,
es decir, con una salida, la
cosa no funcionó. Fue de lo
peor de la feria. Un festejo
que no vale para esta plaza.
X CONCURSO DE EMBOLADORES
Con un descenso de público
importante, se celebró uno
de los clásicos de la feria.
Hubo muchos inventos por
parte de las cuadrillas para
intentar arañar segundos al
cronómetro. Sólo uno de
ellos funcionó. Y al final,
tras toda la ingeniería
puesta al servicio de los
herrajes, ganó
Amposta por quinta
vez en
Zaragoza. Pero ahora
ya se puede ver un duelo
interesante.
Épila
le está echando el aliento
en el cogote. Están en
disposición de disputarles
los concursos de tú a tú.
CONCURSO DE RECORTE LIBRE POR
COMUNIDADES
Explosión de júbilo en el
que era el último festejo de
la feria. Qué bonito fue
todo. Tiene pinta de que se
repetirá. Aunque la entrada
no fue para tirar cohetes,
lo visto en el ruedo para el
público en masa tuvo tirón.
A costa de pasar por encima
de muchas cosas, pero tirón.
Las plazas de toros ya han
pasado a ser un sitio para
entretener a la gente. Mira,
como en el circo.
RESTO DE FESTEJOS
Cuatro festejos más hubo en
la feria. El
desencajonamiento y
exhibición de saltos de
Nicolas Vergonzeanne
que fue muy bueno por lo que
se ofreció, pero muy corto y
que supo a poco. La
actuación del grupo
Arte
Madrileño, que fue
más o menos lo esperado y
con las vacas ideales. Y
además de ellos estuvo el
espectáculo cómico taurino y
el gran prix para las peñas.
|
|
|
Quince hierros, muchos más que otros años han comparecido en
La Misericordia.
HERMANOS MAYLÍN
Hizo
la primera mañana. Cuando no se
tienen las vacas acostumbradas a
capeas duras, es muy complicado
quedar bien en
Zaragoza.
Para ello se debe suplir con
mucho fondo de raza e
inteligencia. De eso no hubo.
Hacer encierros, por muy duros
que sean, no significa estar
preparado para el
Pilar.
La mañana no pudo coger vuelo.
SANTOS ZAPATERÍA
Hizo
la segunda mañana. Como el
momento que atraviesa el hierro
de
Valtierra es bueno,
parecía lógico que fuera a
quedar bien. Y quedó bien. Una
mañana variada con vacas para
todo. Se consienten las mansas
porque hubo de las buenas. Echó
dos de las mejores vacas de la
feria. Y eso, debutando en
Zaragoza
es meritorio. Uno de los que
puede estar satisfecho con su
comparecencia.
HERMANOS OZCOZ
Pese
a no mandar ya en la
organización de los festejos
populares, ha hecho
prácticamente lo mismo que en
años anteriores. Las diferentes
lecturas de esto, que las haga o
hagan, quien o quienes las
tengan que hacer. Seis vacas
para el
XXVII Campeonato Nacional de
Recortadores, una vaca
para saltos la primera noche de
la feria, la mitad de la mañana
del día 12, la mitad de las
vacas de la actuación del grupo
Arte
Madrileño y la mitad de
la mañana del día 18. Eso es lo
que hizo en la feria.
En
las anillas, bien, sin acabar
con el cuadro como otros años
pero bien, demostrando el nivel
que tiene en los cercados. La
vaca para saltos, bien. En la
mañana del día 12, debió haber
algún error y pensaron que iban
a correr una calle. Las vacas
del grupo de arte, bien también.
Y en la mañana del día 18, sí
que estuvo al nivel que se le
espera, aunque se encontró con
una mañana con menor guerra de
la esperada.
En
conjunto bien, pero todo parece
peor por las imposiciones y las
niñerías de no despegarse de la
pareja de baile. Es normal que
se le coja tirria. Y de seguir
así, debería tener descanso de
alguna feria para ver si así
espabilaba. De todas maneras, se
le echaría de menos, la realidad
es esa.
Ozcoz no puede faltar de
la feria, aunque se mereciera
castigo.
HERMANOS MARCÉN
Lógicamente, lo mismo que
Ozcoz.
Calcan las ferias, todo lo
quieren hacer de la manica. Como
por detrás nadie les aprieta,
pueden seguir haciendo y
deshaciendo. Ellos, la collera,
sabrán.
En
las anillas, pese a que se
fueran a cero sus vacas, la cosa
estuvo bastante clara para
cualquiera que entienda. Las
vacas de los franceses,
perfectas. Las del
Arte
Madrileño, también
idóneas. Y en cuanto a las
vaquillas, hay lo que hay. Y
como ya se ha dicho, todo parece
peor por ir acomodado en las
mañanas a medias.
ANDONI REKAGORRI
Reforzado del escaparate de
Zaragoza.
Sus toros valen para los
recortes. Además se emboló uno
la primera noche, se soltaron
dos para las anillas y se
embolaron cuatro la noche de los
emboladores. Además de los
cuatro del concurso del día 12
así como los cinco del día 18.
Presencia tienen, eso ya es
importante, son toros, toros. Y
luego se mueven, tienen mucha
movilidad y aunque tienen a
salir abantos, se centran y
quieren arrancarse a los
recortes. No llegan a transmitir
mucho, pero son buenos para este
festejo.
Los
dos de las anillas valieron
también para el festejo, de los
pocos que se salvaron. Y para
embolar, pues ahí estuvieron.
Eso sí, los desencajonamientos,
aburridos como una ostra.
Al
año que viene pueden volver
perfectamente los de
Andoni
Rekagorri.
CRUZ MADRUGA
Soltó
dos toros para el concurso del
día 12. Muy bien. De presencia,
aunque el primero fuera algo
destartalado, el segundo era un
pavo. Bien la presentación y el
juego bueno también. Cumplieron.
Tenía que ser embolado el de la
final, pero se fue sin las bolas
del palo. Se quedó sin ver.
HEREDEROS DE ÁNGEL MACUA
Otro
que puede irse satisfecho de
Zaragoza.
Hizo la quinta mañana de
vaquillas. A un nivel bastante
alto durante la hora de la tele.
Bajó sensiblemente la segunda
hora. La media le llega para el
aprobado. Conjuntando reses de
la casa, con lo adquirido de
"La Bomba",
estuvo a la altura del
Pilar,
que no es poco. Echó varias
vacas con actuaciones
destacadas, de las mejores de la
feria. Se merece repetir y al
año que viene, sin la carga del
debut, plantear todo mejor.
JOSÉ ARRIAZU E HIJOS
Corrió la sexta mañana de la
feria. El comportamiento de las
reses de
Arriazu ya se sabe lo que
es. Reses de reacciones
espectaculares en otros
contextos. Con espacios abiertos
y necesidad de saber trabajar la
capea, la cosa se complica
mucho. No son vacas hechas para
Zaragoza
y por eso se les hace todo muy
cuesta arriba. Y claro al ser
Arriazu,
se esperaba más. Sea justo o
injusto, esa es la sensación.
También soltó las vacas de
después de los emboladores, así
como los becerros del
espectáculo cómico.
GERMÁN VIDAL
La
séptima mañana corrió. Mañana
fría, no rompieron las vacas.
Animales acostumbrados a otro
tipo de festejo muy diferente a
este. Lo que no exime para que
la mañana no estuviera bien. Tan
sólo un par de vacas de las
quince soltadas estuvieron a un
nivel alto.
RAFAEL ALARCÓN
Hizo
el XXV
Concurso de Roscaderos.,
además del
gran prix. Mucho mejor
que el año pasado. Este año la
nota fue alta. Doce vacas para
roscaderos en
Zaragoza
es muy complicado. Y quedar como
quedó no es tan sencillo. Se vio
un fondo en las reses muy
interesante. El conjunto fue
bueno aunque lo emborronara con
las dos últimas. Destacó sobre
manera la
Nº 143, que hizo una
entrada al roscadero de quitarse
el sombrero. Una de las
ganaderías que salen impulsadas
de La
Misericordia.
JOSÉ LUIS CUARTERO
Hizo
la octava mañana y se llevó el
premio a la mejor ganadería con
todo merecimiento. Se encontró
el ruedo más duro de la feria y
las vacas pudieron con él. Una
mañana de un nivel muy alto de
Cuartero.
Fue la mejor mañana que se vio
en las fiestas. Muy bien, así,
por su sitio. Pidiendo mañana
dura y dejando el sello.
Bastantes vacas destacaron y en
especial hubo cuatro que se
colaron por derecho propio entre
las mejores de la feria. Con el
denominador común de la raza, la
dureza y el saber trabajar. Al
año que viene estará en
disposición de exigir.
Triunfador absoluto del
Pilar.
CASA DOMECQ
Cinco
toros para las anillas. Ni uno
de ellos valió. Gran bagaje del
hierro de la seguramente familia
ganadera con más cabezas del
panorama nacional.
JAIME BRUJÓ
Dos
toros para las anillas. Y
tampoco valió ninguno de los
dos, pues nada, adiós.
FERNÁNDEZ PALACIOS
Un
toro en la feria. Para las
anillas estuvo bien y se emboló
por la noche, estando correcto.
Bien, vale.
|
|
|
Y a continuación el
balance de la organización de este año.
ORGANIZACIÓN
Aterrizaba en
Zaragoza
Toropasión
con una amplia experiencia en
organización de festejos
populares. Así como estando al
mando de abundantes plazas de
capitales de provincia. Pero,
amigo,
Zaragoza es diferente a
todo.
Fundamentalmente han venido con
ganas de hacerlo bien. Y así se
empieza bien. Las intenciones
estaban claras con el cartel y
con las ruedas de prensa de
presentación. Empezaron dándole
categoría, la que que otros,
pese a poner el cazo, nunca
quisieron darle. Además se ha
hecho una campaña publicitaria
nunca vista. Carteles a mansalva
y hasta publicidad en
televisión, sumada a la de los
periódicos. Por delante, nada
que reprochar.
Una
vez en la feria, pues ha habido
más cosas buenas que malas, por
tanto, siendo su primer año,
pueden estar satisfechos. Cierto
es que se han apoyado en los que
mandaban antes, y así han podido
cogerle el hilo mejor. Tendrán
que corregir lo que ha fallado.
En lo
negativo, lo más significativo
han sido las negociaciones a la
baja. Entrar a valorarlas en
concreto, siendo que luego,
salvo en las anillas, no han
afectado, no procede, pero la
realidad ha sido esa. Si la
tijera estaba guiada por
Taurodelta
o
Toropasión, es la duda,
pero no se puede entrar como un
elefante en una cacharrería a
querer recortar a todo el mundo.
Lo de las anillas, fue ridículo.
Si
Toropasión no tiene culpa
de eso, habrá de entender que la
cara visible son ellos, y por
tanto aguantar el chaparrón.
Otro
punto positivo fue la
instalación de una megafonía
nueva por su cuenta. Por fin
Zaragoza
tenía un equipo de megafonía en
condiciones. Que se le caiga la
cara de vergüenza a la
DPZ.
Eso hizo que pudieran hacer sus
presentaciones típicas. Con
confetis en los festejos
matutinos y con bengalas en los
nocturnos. Le dan categoría al
festejo, quedan bien, con esa
música prácticamente
apocalíptica y sobrecogedora.
Música, que si lo que detrás, en
forma de festejo, lo refrenda
queda bien, si no, puede llevar
a mofa. Lo que ya choca más, es
que durante el concurso, antes
de la salida del animal, sonara
música. Eso a un servidor, no le
gusta, opinión personal.
En
cuanto al uso de la megafonía,
la base de la feria fue para
Ángel
Marín. Tiene tablas de
muchos concursos hechos ya y
supo estar a la altura de lo que
pedía
Zaragoza. Seriedad y
sobriedad, así como didáctica.
Lo hizo en su justa medida y no
se puso pesado. Se desenvolvió
bien. En los concursos bien y en
las vaquillas, bien también
porque se dio el nombre y número
de todas las vacas que saltaron
a la arena. Por fin. Y también
la alabanza que merece que en
los últimos festejos de la
feria, se escuchara por
megafonía la jotica al saltar el
último animal del festejo.
Sensacional.
Lo
que pasa, que en el tema de
megafonía, hay que poner en el
debe el agravio comparativo.
Mientras que tres festejos,
tuvieron un segundo micrófono,
haciendo las veces de animador,
los demás no lo tuvieron. Y
claro si lo de unos es todo "biennnn",
"biennnn" buahhhh", ¿por qué lo
de los demás no? Claro, así todo
parece mejor. La sugestión y
manipulación (sin tener tono
peyorativo) es lo que tienen.
Ellos como empresa tienen que
vender su moto, pero por
momentos roza lo cargante, la
adulación, la alabanza continua
y la petición de aplausos.
Andrés
Santander, en su función,
para lo que ellos buscan, pues
lo hace bien, pero no es
Zaragoza
plaza de megafonías
rimbombantes. Y si se hace, pues
para todos por igual. Aunque
igual mejor que las anillas
sigan siendo serias.
Un
par de detalles se les fueron en
las presentaciones. Los últimos
años, para los concursos, se
ponían en funcionamiento los
letreros de la plaza, este año
estuvieron apagados. Servían
bien para hacer su función. Este
año se fueron al limbo. Y
también el que no se entregaran
detalles por parte de la
organización a gente que merecía
ser recordada por la temporada o
por la trayectoria, como sí que
se hacía hasta los últimos años.
Así como que los trofeos
menguaron de tamaño respecto a
los años anteriores, a ver si
crecen al año que viene.
La
feria la plantearon bien, con
las vaquillas, por el modelo, lo
acertaron de pleno, aunque
tragaran con los que van a
medias, tirón de orejas. Además
dieron premio a la mejor
ganadería y a la mejor vaca.
Perfecto. Acertaron con el
plantel también. Vinieron los
que tenían que venir.
Para
los concursos, camisetas suyas
al margen (pero acertado lo
goyesco), eligieron con
criterio a los participantes y
también vinieron los que tenían
que venir. Lo hicieron bien ahí
también. Y en cuanto al ganado
que de ellos dependió, de
irreprochable presentación y
después de buen juego salvo los
de las anillas. Ellos tienen la
ventaja de disponer toros en su
finca, con eso jugaban. Les
salió bien.
Lo
bien hecho, supera con creces a
los errores. Fundamentalmente
han remozado la feria, sin tocar
la base, que eso es lo que
tocaba. La jugada les ha salido
bien. Acertaron con la primera
mañana de vaquillas, fallaron
los concursos del segundo fin de
semana. Había demasiados
festejos, por tanto era de
imaginar que no todo iba a
funcionar.
También es cierto, que al año
que viene habrá que ponerles el
listón más alto. Pero de
primeras han demostrado que se
podían hacer más cosas y mejor
hechas de lo que se hacía hasta
entonces. Han ganado por goleada
al equipo anterior, aunque en
aquellas filas pueda estar el
mejor jugador del momento.
Lástima que el equipo no jugara
para él.
Bien
Toropasión.
|
|
|
Y
todo esto es lo que ha dado de sí la
Feria del Pilar de 2009. Una feria en la que hubo un
aumento de precios en lo que no eran vaquillas del 12´5%
(algunos más, otros menos). Mientras tanto la
DPZ, mirando. Se incumple el
pliego, en teoría, que marca que no puede subir más del
IPC, y además se conseguían
puntos a favor si los precios no se movían. Otro ejemplo más
de lo que le importan a la DPZ
los festejos populares. Dame pan y dime tonto, que paguen el
canon y me den las entradas que les exijo, que lo demás me
da igual. Gracias políticos, se os quiere.
Después de diecinueve festejos, centenares de vacas y toros
salidas por los toriles, esto fue la feria.
Y
ahora, a pasar el invierno.
Víctor Manuel Giménez
Remón
|
|